- Sociedad
- 26.07.2016
PIDIERON UN RESCATO DE 250.000 PESOS
Un hombre fue secuestrado junto al vigilador de su cuadra
La víctima fue abordado por los delincuentes cuando estacionaba su camioneta en Morón. Al vigilador, que había sido testigo del hecho, también se lo llevaron cautivo. Ambos fueron liberados horas después.
Un hombre fue secuestrado cuando fue a estacionar su camioneta luego de dejar a su esposa en la puerta de su casa en el partido bonaerense de Morón. La banda también se llevó cautivo al vigilador de la cuadra y pidió un rescate de hasta 250.000 pesos, informaron hoy fuentes policiales.
Si bien trascendió hoy, este doble secuestro se inició el domingo por la noche y ambas víctimas fueron liberadas sanas y salvas ya en la madrugada de ayer, tras permanecer cautivas tres horas y media.
Todo se inició a las 21 del domingo cuando Carlos Ribera (63), empleado, llegó manejando su camioneta Ford EcoSport a la puerta de su casa, en la calle Vicente Casares al 600 de la localidad de Villa Sarmiento, donde su mujer bajó y él se fue a estacionar.
Cuando Ribera llegaba al terreno que utiliza como cochera, a la vuelta de su casa, en la calle Virrey Liniers y Rivera Indarte, fue abordado por una banda de secuestradores que se lo llevó cautivo en su propia camioneta. Los delincuentes también secuestraron al vigilador de la cuadra, que se había convertido en testigo del hecho.
El empleado de seguridad secuestrado fue identificado por las fuentes policiales como Miguel Adrián Pérez (43). Las fuentes contaron que en pocos minutos, a las 21.06 exactamente, la mujer de Ribera, que ya estaba aguardando la llegada de su marido, recibió desde el celular de su esposo un llamado telefónico. Una voz masculina, que no era la de su marido, le dijo que lo tenían secuestrado y que si lo querían volver a ver con vida debía juntar un rescate de 250.000 pesos.
“Con el correr de las horas, los delincuentes se dieron cuenta que la mujer no tenía la posibilidad de pagar esa suma de dinero y bajaron sus pretensiones. Terminaron pidiéndole 10.000 pesos”, dijo a la agencia Télam un vocero policial.
Por causas que aún se investigan, los llamados extorsivos se interrumpieron y ya a las 0.30 de ayer, la banda decidió liberar a Ribera y al vigilador Pérez en la localidad de González Catán, partido de La Matanza. Las víctimas caminaron hasta la comisaría de esa localidad, ubicada en la calle Sáez 404, a pocas cuadras de donde fueron liberadas, desde donde Ribera llamó a su esposa para avisar que ya había terminado el secuestro.
El caso es investigado por la Fiscalía Federal 1 de Morón, a cargo del fiscal Sebastián Basso, y por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Morón. Los pesquisas analizaban las coincidencias de este hecho y del modus operandi con otros secuestros ocurridos en la zona para determinar si actuó la misma banda.
Los secuestradores se quedaron con un teléfono celular y con la camioneta Ford EcoSport blanca de la víctima, patente PGS397, que aún no había sido localizada.
Si bien trascendió hoy, este doble secuestro se inició el domingo por la noche y ambas víctimas fueron liberadas sanas y salvas ya en la madrugada de ayer, tras permanecer cautivas tres horas y media.
Todo se inició a las 21 del domingo cuando Carlos Ribera (63), empleado, llegó manejando su camioneta Ford EcoSport a la puerta de su casa, en la calle Vicente Casares al 600 de la localidad de Villa Sarmiento, donde su mujer bajó y él se fue a estacionar.
Cuando Ribera llegaba al terreno que utiliza como cochera, a la vuelta de su casa, en la calle Virrey Liniers y Rivera Indarte, fue abordado por una banda de secuestradores que se lo llevó cautivo en su propia camioneta. Los delincuentes también secuestraron al vigilador de la cuadra, que se había convertido en testigo del hecho.
El empleado de seguridad secuestrado fue identificado por las fuentes policiales como Miguel Adrián Pérez (43). Las fuentes contaron que en pocos minutos, a las 21.06 exactamente, la mujer de Ribera, que ya estaba aguardando la llegada de su marido, recibió desde el celular de su esposo un llamado telefónico. Una voz masculina, que no era la de su marido, le dijo que lo tenían secuestrado y que si lo querían volver a ver con vida debía juntar un rescate de 250.000 pesos.
“Con el correr de las horas, los delincuentes se dieron cuenta que la mujer no tenía la posibilidad de pagar esa suma de dinero y bajaron sus pretensiones. Terminaron pidiéndole 10.000 pesos”, dijo a la agencia Télam un vocero policial.
Por causas que aún se investigan, los llamados extorsivos se interrumpieron y ya a las 0.30 de ayer, la banda decidió liberar a Ribera y al vigilador Pérez en la localidad de González Catán, partido de La Matanza. Las víctimas caminaron hasta la comisaría de esa localidad, ubicada en la calle Sáez 404, a pocas cuadras de donde fueron liberadas, desde donde Ribera llamó a su esposa para avisar que ya había terminado el secuestro.
El caso es investigado por la Fiscalía Federal 1 de Morón, a cargo del fiscal Sebastián Basso, y por detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Morón. Los pesquisas analizaban las coincidencias de este hecho y del modus operandi con otros secuestros ocurridos en la zona para determinar si actuó la misma banda.
Los secuestradores se quedaron con un teléfono celular y con la camioneta Ford EcoSport blanca de la víctima, patente PGS397, que aún no había sido localizada.
- SECCIÓN
- Sociedad
- TAGS
- Morón
- Secuestros
Secuestraron a una anciana y la liberaron porque se habían equivocado de víctima
En lo que va del año hubo 173 secuestros en CABA y el Conurbano
Detuvieron a cuatro sospechosos por un secuestro en Cañuelas
Secuestraron y liberaron al padre de un concejal de Tres de Febrero
Ferrari: "De ninguna manera reconozco que haya más secuestros"
Bressi negó que hayan aumentado los secuestros en la Provincia
Ritondo afirmó que los secuestros bajaron un 44 por ciento con respecto al 2015