- Tiempo Libre
- 03.12.2015
EL DOMINGO 6 DE DICIEMBRE
Cocinarán un omelette gigante para el 131° aniversario de Pigüé
La denominada Cofradía Mundial de los Caballeros de la Omelette Gigante cocinará ese plato utilizando 17 mil huevos. También habrá un desfile cívico-militar y un show de Los Nocheros, entre otras actividades.
El plato tradicional de Francia se realizará el domingo 6 de diciembre en el parque municipal Fortunato Chiappara, ubicado en la entrada principal de la ciudad. Para esta nueva edición se utilizarán 17 mil huevos, 100 kilogramos de jamón y varios kilos de condimentos, que serán colocados en una gigantesca sartén de 4,20 metros, y que se ubicará en un carro sobre rieles para su transporte.
"La fiesta comenzará a las 9 con la misa de campaña, luego el desfile de la Cofradía de los Caballeros y luego a partir de las 11 la tradicional rotura de los huevos", indicaron los organizadores del evento a la agencia Télam.
"Para la preparación habrá 16 equipos de cuatro personas llamados cofrades, quienes vestidos con saco y camisa blancos, pantalón y zapatos negros, corbata amarilla y un gorro de cocinero de casi medio metro de alto se dispondrán de romper los huevos y a cortar las baguettes de 3,5 metros de largo y 30 kilogramos de peso", agregaron.
Asimismo, a las 18 se llevará a cabo un desfile cívico-militar por las calles internas del paseo público. Luego estará la elección de la reina y el cierre se realizará desde las 20.30 con la actuación de Los Nocheros.
Pigüé se encuentra en los antiguos dominios del cacique Calfucurá y su nombre, que deriva del idioma mapuche, significa "lugar de reunión o parlamento". Tal denominación se escogió porque en estas tierras se libró la batalla de Pihué (1858) en la que se enfrentó la vanguardia de la última línea de fortín a cargo del coronel Nicolás Granada, contra indígenas comandados por los cacicazgos que respondían al cacique Juan Calfucurá.
Pigüé, ubicada a 132 kilómetros al noroeste de Bahía Blanca, fue fundada el 4 de diciembre de 1884 por los franceses Clemente Cabanettes, Eduardo Casey y Francisco Issaly, cuyos nombres llevan hoy las principales calles de la ciudad.