- Legislatura
- 18.05.2016
OPINIÓN
Diputados del FPV: la novela de nunca acabar
Una nueva ruptura, esta vez con características especiales, amenaza con dividir aún más al espacio kirchnerista en la Cámara Baja.
Si bien era previsible que tras la humillante derrota en las elecciones del año pasado la incertidumbre y el desconcierto ondearan en el horizonte del peronismo bonaerense, pocos esperaban que esa llanura verde y mansa que se extiende hasta donde los ojos avidinan el monte, se convirtiera en un desierto incómodo y hostil en el que no parece poder sobrevivir ni siquiera el peronista más fuerte.
Mientras que los intendentes, convertidos en funambulistas, hacen equilibrio para tratar de que sus reposicionamientos no hagan enojar a la administración provincial, que debe facilitarles los recursos para poder gobernar, los legisladores provinciales arman y desarman bancadas, haciendo que los hemiciclos de ambas cámaras se parezcan al mapa de Europa oriental tras la caída de los regímenes que pertenecían al llamado "socialismo real".
A principios de diciembre, cuando todavía no se habían llevado a cabo las sesiones preparatorias para elegir autoridades en diputados y senadores, el Frente para la Victoria contaba con 36 escaños en la cámara baja y 17 senadores. Cinco meses después hay tres bloques en cada uno de los recintos que expresan escisiones de la fuerza política que gobernó la provincia (y también el país) durante los 12 años que precedieron a María Eugenia Vidal.
Sin embargo, esto no es todo: a las rupturas políticas se le suma ahora una amorosa, que amenaza con terminar en una nueva división de uno de los bloques de diputados que se desprendieron de aquel original de 36 presidido por José Ottavis, que dicho sea de paso ostentaba holgadamente la primera minoría.
Es que la relación sentimental que tenían desde hace varios meses los diputados Walter Abarca y Valeria Amendolara llegó a su fin, y este episodio, que podría tranquilamente haber quedado dentro de cuatro paredes, ahora puede convertirse en el epílogo que también termine con el bloque de 13 legisladores que preside justamente el ex secretario de Néstor Kirchner y se llama FPV-PJ.
Además de este espacio, también podemos encontrar diputados kirchneristas entre los 6 legisladores del bloque "Peronismo para la Victoria-FPV", y entre los 17 integrantes de lo que queda del FPV inicial (que increiblemente se encuentra sin presidente de bloque desde hace un mes, dado que no se pueden poner de acuerdo en su interior).
Así las cosas, con la bancada conducida hasta hoy por Abarca y Amendolara a punto de fracturarse, podríamos llegar a tener hasta cuatro bloques de diputados kirchneristas.
Mientras que los intendentes, convertidos en funambulistas, hacen equilibrio para tratar de que sus reposicionamientos no hagan enojar a la administración provincial, que debe facilitarles los recursos para poder gobernar, los legisladores provinciales arman y desarman bancadas, haciendo que los hemiciclos de ambas cámaras se parezcan al mapa de Europa oriental tras la caída de los regímenes que pertenecían al llamado "socialismo real".
A principios de diciembre, cuando todavía no se habían llevado a cabo las sesiones preparatorias para elegir autoridades en diputados y senadores, el Frente para la Victoria contaba con 36 escaños en la cámara baja y 17 senadores. Cinco meses después hay tres bloques en cada uno de los recintos que expresan escisiones de la fuerza política que gobernó la provincia (y también el país) durante los 12 años que precedieron a María Eugenia Vidal.
Sin embargo, esto no es todo: a las rupturas políticas se le suma ahora una amorosa, que amenaza con terminar en una nueva división de uno de los bloques de diputados que se desprendieron de aquel original de 36 presidido por José Ottavis, que dicho sea de paso ostentaba holgadamente la primera minoría.
Es que la relación sentimental que tenían desde hace varios meses los diputados Walter Abarca y Valeria Amendolara llegó a su fin, y este episodio, que podría tranquilamente haber quedado dentro de cuatro paredes, ahora puede convertirse en el epílogo que también termine con el bloque de 13 legisladores que preside justamente el ex secretario de Néstor Kirchner y se llama FPV-PJ.
Además de este espacio, también podemos encontrar diputados kirchneristas entre los 6 legisladores del bloque "Peronismo para la Victoria-FPV", y entre los 17 integrantes de lo que queda del FPV inicial (que increiblemente se encuentra sin presidente de bloque desde hace un mes, dado que no se pueden poner de acuerdo en su interior).
Así las cosas, con la bancada conducida hasta hoy por Abarca y Amendolara a punto de fracturarse, podríamos llegar a tener hasta cuatro bloques de diputados kirchneristas.
- AUTOR
- Ezequiel Martínez Hudson
- SECCIÓN
- Legislatura