Reunión cumbre: pese a la situación de hospitales, descartan fase 1 y apuestan a seguir el "esquema actual"

Por Tomás Correa


La última semana, los medios tuvieron que referirse a la alta meseta en baja de casos que había quedado en el país, en la provincia y, ante todo, en el AMBA. Bueno, esa meseta comenzó a subir lentamente otra vez, en lo que podría leerse como un camino inevitable a una tercera ola.

Tal como algunos dirigentes no se cansan de repetir, “cuando la ignorás, la pandemia te da un cachetazo de realidad”. Por ello que la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ya salió a hablar de una posible suspensión de las clases presenciales, tras ser el mayor tema de discusión y judicialización del último mes. Hoy, no obstante, volvió a meter el freno y la configuró a esa determinación como "la última medida".



Con 500 muertos diarios y el aumento de casos que nombramos anteriormente, hoy se reunirán Felipe Miguel por la Ciudad, Carlos Bianco por la provincia y Santiago Cafiero por la Nación.

Esta mañana, en declaraciones con Radio 10, fue el mismo presidente Alberto Fernández quien descartó un posible paso a una fase 1, por cuestiones económicas y hasta sociológicas. En principio, esa sería la única premisa de la reunión.



Desde fuentes cercanas al gobierno provincial señalaron que, al igual que en todas las reuniones, irán con la idea de consensuar para encontrar una salida conjunta que sirva para bajar la curva. Según se conoció, la reunión se dará este martes desde las 15:00 en Casa Rosada.

De hecho, luego de algunas versiones mediáticas que señalaban que PBA iría en busca de un cierre total en esta oportunidad, las fuentes aclararon a este medio que la gestión de Axel Kicillog "no está pidiendo un regreso a la Fase 1" y que, en cambio, la apuesta es por "la continuidad del esquema actual de medidas de cuidado, intensificando los controles para que las mismas se cumplan de manera estricta".


EN MEDIO, LOS HOSPITALES

La Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (Cicop) emitió una serie de comunicados destacando que “frente a la llegada del invierno, la estrategia para evitar un colapso sanitario requiere cierre intermitentes, con medidas de ayuda social, aceleración del ritmo de vacunación y fortalecimiento presupuestario del sistema sanitario”.



Se sabe que la situación hospitalaria en el territorio bonaerense está con porcentajes que preocupan, más teniendo en cuenta la suba de contagios.

Desde Cicop, Guillermo Pacagnini señaló que “estamos muy preocupados por el aumento de casos diarios en los últimos días, donde hay crecimiento en el AMBA, pero también en las principales ciudades del interior” y agregó: “Esto está obligando a que los gobiernos en las jurisdicciones correspondientes evalúen nuevas restricciones a partir del viernes, que es algo que venimos reclamando hace tiempo”.



También hizo hincapié en que “tenemos que entender que en los últimos 14 días se produjeron más de 288.000 contagios, lo que significa que es un aumento exponencial, y con niveles muchos más altos que la primera ola” y especificó: “Esto tiene que ver con que hubo una política mucho más aperturista, también con las variantes del virus que circulan, y con la apertura de actividades no-covid en el sistema de salud”.

En relación al pedido de mayor restricciones, el secretario general de Cicop expresó que “hay que restringir de manera temporal y con apoyo social, para disminuir la presión sobre el sistema de salud y el riesgo. También hay que fortalecer el sistema de salud avanzando hacia un sistema único, con presupuesto, planteles y centralización de las decisiones. Sino la saturación con riesgo de colapso va a ser una realidad”.

“Las restricciones tienen que ser sostenidas con apoyo social. Nadie tiene que estar encerrado en el dilema de tener la posibilidad de perder su trabajo, o de estar en riesgo social por no tener trabajo”

“Hay que aumentar los testeos para poder hacer un mapeo epidemiológico, y vacunar. Ahí está el tema de la liberación de patentes, de la producción pública y de declarar de utilidad pública a las vacunas que están en la planta de Garín. Porque el porcentaje de vacunación sigue siendo bajo” agregó Pacagnini.

Para finalizar, el secretario general concluyó: “Creemos que hay que hacer estos cambios en la política sanitaria y político-social, disponiendo de los recursos para poder sostenerlo. Es momento de privilegiar eso por encima de los acuerdos con el FMI”.