- Política
- 13.09.2021
Elecciones 2021
Elecciones 2021: La realidad, una pared que no es imaginaria
El oficialismo está tras un desafío más que importante en la definición de su futuro: dar vuelta una elección que, al menos en la teoría, estaba ganada. Las metidas de pata, la pandemia y la crisis económica fueron cruciales en la decisión de la gente.
Por Tomás Correa
“No podíamos creer que el gobierno no estuviera ganando”, fue el mensaje que llegó del otro lado de la “grieta” luego de conocerse los primeros resultados.
Los primeros resultados - y los últimos - sorprendieron a propios y ajenos: el factor Facundo Manes fue lo que desequilibró toda la balanza. Quienes vaticinaban un número desalentador para el neurocientífico quedaron lejos de la hecatombe, ya que fueron más de 1.000.000 de votos los que sacó en la provincia de Buenos Aires.
Esto deja dos lecturas para el Frente de Todos en la provincia de Buenos Aires: En términos electorales, la diferencia a favor de 900.000 votos por encima de Diego Santilli los posiciona en una plataforma de votos de un potencial empate - tomando como premisa que raramente se integran los votos totales de una interna -. Por otro lado, muestra que existe un voto “castigo” que acompaña a los outsiders de la política, una lectura necesaria.
Después, el momento de autocrítica, inevitablemente, tuvo que haber llegado al riñón de la gestión nacional. Las semanas que se avecinan deberán ser de cambios o de anuncios que den un “golpe de efecto” para comenzar a mostrar signos de respuesta ante una acción que la gente dejó clara. “Nada es más importante que escuchar al pueblo; hoy nos ha expresado que cometimos errores y vamos a atender a esa demanda”, expresó el presidente Alberto Fernández desde el búnker del FDT la noche del domingo.
La lectura, en principio, parece adecuada. La situación sanitaria, que meses atrás era la primera causa de preocupación, con la baja de casos dejó de ser un factor decisivo en el voto - sumado a que, sí lo era, la foto de Olivos tuvo su rebote -, y la economía volvió a tener un lugar preponderante en la votación.
"Es un llamado de atención importante. Nos votaron para cambiar la realidad y la pandemia no nos dejó hacer todo lo que queríamos", reflexionó un funcionario cercano al armado en diálogo con NuevaBA.
Y, claramente, la crisis - tanto heredada, endurecida por la pandemia y más - fue un condicionante para el Gobierno al momento de capitalizar los votos. La solución parecería clara: las políticas públicas y sociales serán claves de acá en adelante. No solo para las elecciones, sino para comenzar a mejorar la vida de cada argentino y argentina.
Los aumentos de precios, la inflación, la emergencia habitacional y más problemáticas deberán ser tratadas con mucha atención si se busca tener un mejor resultado en el mes de noviembre.
De igual manera, cabe recalcar nuevamente que la elección fue sorpresiva. El último corte - al que tenían acceso todos los partidos -, daba una amplia victoria del oficialismo en la provincia de Buenos Aires. Las caras de Diego Santilli y Facundo Manes lo demostraron cuando hablaron desde La Plata alrededor de las 20:30.
La microeconomía, los dirigentes sociales y la territorialidad serán puntos claves para la campaña del Frente de Todos de cara a noviembre. Tener en cuenta los factores que influyen en la vida de las personas y, por ende, en la votación, serán más que necesarios para lograr dar vuelta el resultado.
Por último, y no menos importante, es hora de pensar en por qué los extremos crecen: una gran elección en todo el país para el Frente de Izquierda, como así también un crecimiento de la extrema derecha en algunos lugares.
Barajar y dar de nuevo, dirían en algunos lugares. Esa parece ser la solución o la reflexión de este lunes para el oficialismo. Ahora queda ver como continúa la reacción. En palabras de un cercano a la gestión: "Hay que analizar bien el resultado y repensar estrategias".
“No podíamos creer que el gobierno no estuviera ganando”, fue el mensaje que llegó del otro lado de la “grieta” luego de conocerse los primeros resultados.
Los primeros resultados - y los últimos - sorprendieron a propios y ajenos: el factor Facundo Manes fue lo que desequilibró toda la balanza. Quienes vaticinaban un número desalentador para el neurocientífico quedaron lejos de la hecatombe, ya que fueron más de 1.000.000 de votos los que sacó en la provincia de Buenos Aires.
Esto deja dos lecturas para el Frente de Todos en la provincia de Buenos Aires: En términos electorales, la diferencia a favor de 900.000 votos por encima de Diego Santilli los posiciona en una plataforma de votos de un potencial empate - tomando como premisa que raramente se integran los votos totales de una interna -. Por otro lado, muestra que existe un voto “castigo” que acompaña a los outsiders de la política, una lectura necesaria.
Después, el momento de autocrítica, inevitablemente, tuvo que haber llegado al riñón de la gestión nacional. Las semanas que se avecinan deberán ser de cambios o de anuncios que den un “golpe de efecto” para comenzar a mostrar signos de respuesta ante una acción que la gente dejó clara. “Nada es más importante que escuchar al pueblo; hoy nos ha expresado que cometimos errores y vamos a atender a esa demanda”, expresó el presidente Alberto Fernández desde el búnker del FDT la noche del domingo.
La lectura, en principio, parece adecuada. La situación sanitaria, que meses atrás era la primera causa de preocupación, con la baja de casos dejó de ser un factor decisivo en el voto - sumado a que, sí lo era, la foto de Olivos tuvo su rebote -, y la economía volvió a tener un lugar preponderante en la votación.
"Es un llamado de atención importante. Nos votaron para cambiar la realidad y la pandemia no nos dejó hacer todo lo que queríamos", reflexionó un funcionario cercano al armado en diálogo con NuevaBA.
Y, claramente, la crisis - tanto heredada, endurecida por la pandemia y más - fue un condicionante para el Gobierno al momento de capitalizar los votos. La solución parecería clara: las políticas públicas y sociales serán claves de acá en adelante. No solo para las elecciones, sino para comenzar a mejorar la vida de cada argentino y argentina.
Los aumentos de precios, la inflación, la emergencia habitacional y más problemáticas deberán ser tratadas con mucha atención si se busca tener un mejor resultado en el mes de noviembre.
De igual manera, cabe recalcar nuevamente que la elección fue sorpresiva. El último corte - al que tenían acceso todos los partidos -, daba una amplia victoria del oficialismo en la provincia de Buenos Aires. Las caras de Diego Santilli y Facundo Manes lo demostraron cuando hablaron desde La Plata alrededor de las 20:30.
Otro punto a destacar del discurso de Alberto: Hablar de finalización de mandato y sus objetivos da muestra de que, en un futuro, la reelección no será una posibilidad en el año 2023.
La microeconomía, los dirigentes sociales y la territorialidad serán puntos claves para la campaña del Frente de Todos de cara a noviembre. Tener en cuenta los factores que influyen en la vida de las personas y, por ende, en la votación, serán más que necesarios para lograr dar vuelta el resultado.
Por último, y no menos importante, es hora de pensar en por qué los extremos crecen: una gran elección en todo el país para el Frente de Izquierda, como así también un crecimiento de la extrema derecha en algunos lugares.
Barajar y dar de nuevo, dirían en algunos lugares. Esa parece ser la solución o la reflexión de este lunes para el oficialismo. Ahora queda ver como continúa la reacción. En palabras de un cercano a la gestión: "Hay que analizar bien el resultado y repensar estrategias".
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