- Política
- 04.10.2022
Interna opositora
La UCR bonaerense en su encrucijada: entre “respetar la pluralidad” y “no lesionar la esperanza de cambio”
Las críticas de Facundo Manes a Mauricio Macri por el abuso de la justicia durante su gobierno hizo crujir a Juntos por el Cambio y la UCR dio dos respuestas en simultaneo: una desde la mesa nacional y otra de la bonaerense.
Por Juan Vera Visotsky
Si hay algo que nadie se atreve a hacer en Juntos por el Cambio es cuestionar abiertamente a Mauricio Macri. Ni siquiera sus más acérrimos competidores. A Facundo Manes no se sabe si no se lo dijeron cuando ingresó a la coalición o acaso es una estrategia para comenzar, tímidamente, a cambiar esta máxima cambiemita.
Es que en off el gobernador jujeño y pretendiente a la presidencia Gerardo Morales había esbozado que si Macri era candidato el “abandonaría Juntos por el Cambio”. Pero las declaraciones de Manes fueron más allá: “El gobierno del expresidente Macri llegó con la obligación de sanear las cloacas de los servicios de inteligencia, ciertos aspectos de la influencia del poder político en la Justicia. Lamentablemente es una deuda que tenemos que reconocer”, dijo el diputado nacional del radicalismo y generó una profunda tensión en la coalición opositora.
Además, el presidenciable radical agregó: “En el gobierno anterior hubo un populismo institucional, es un problema crónico de la Argentina. Para mí, no hay crecimiento económico ni desarrollo si no hay una modernización institucional. Es una falla desde hace mucho tiempo”, indicó y enfatizó: “Yo creo que el gobierno de Macri tuvo una deuda con el saneamiento de la justicia y creo que sin eso la Argentina no se va a desarrollar”.
Las críticas no tardaron en llegar de parte del PRO, e incluso trascendió que se discutió una posible expulsión de JXC. Un referente “halcón” de la provincia de Buenos Aires negó rotundamente esta versión, aunque si admitió que molestaron las declaraciones a las que consideraron “agresivas”; y que lo que hay que hacer es “ganarle en las paso”.
El radicalismo por su parte reaccionó de manera diversa en esta situación. La mesa nacional que preside Morales le lanzó una advertencia al neurocientífico con el comunicado que difundió, en el cual declararon que “cualquier manifestación que se aparte de ese rumbo, no importa de dónde provenga, lesiona la esperanza que venimos construyendo desde JxC”.
Sin embargo, en la UCR bonaerense la postura fue otra: llamaron a “respetar la pluralidad para construir un mejor Juntos por el Cambio”. “Cualquier intento de uniformidad lesiona la construcción de un proyecto colectivo y democrático”, agregaron en una defensa al neurocientífico.
Es que la filial bonaerense del partido centenario es presidida por Maximiliano Abad, presidente del bloque de Juntos en la cámara de diputados de la provincia y uno de los encargados de convencer a Manes de que encabece la formula radical en 2021. Su principal respaldo está en la estructura radical de PBA, que apoya y alienta su candidatura a presidente.
Manes hizo lo único que no está permitido en JxC: cuestionar a Mauricio Macri
Si hay algo que nadie se atreve a hacer en Juntos por el Cambio es cuestionar abiertamente a Mauricio Macri. Ni siquiera sus más acérrimos competidores. A Facundo Manes no se sabe si no se lo dijeron cuando ingresó a la coalición o acaso es una estrategia para comenzar, tímidamente, a cambiar esta máxima cambiemita.
Es que en off el gobernador jujeño y pretendiente a la presidencia Gerardo Morales había esbozado que si Macri era candidato el “abandonaría Juntos por el Cambio”. Pero las declaraciones de Manes fueron más allá: “El gobierno del expresidente Macri llegó con la obligación de sanear las cloacas de los servicios de inteligencia, ciertos aspectos de la influencia del poder político en la Justicia. Lamentablemente es una deuda que tenemos que reconocer”, dijo el diputado nacional del radicalismo y generó una profunda tensión en la coalición opositora.
Además, el presidenciable radical agregó: “En el gobierno anterior hubo un populismo institucional, es un problema crónico de la Argentina. Para mí, no hay crecimiento económico ni desarrollo si no hay una modernización institucional. Es una falla desde hace mucho tiempo”, indicó y enfatizó: “Yo creo que el gobierno de Macri tuvo una deuda con el saneamiento de la justicia y creo que sin eso la Argentina no se va a desarrollar”.
Las críticas no tardaron en llegar de parte del PRO, e incluso trascendió que se discutió una posible expulsión de JXC. Un referente “halcón” de la provincia de Buenos Aires negó rotundamente esta versión, aunque si admitió que molestaron las declaraciones a las que consideraron “agresivas”; y que lo que hay que hacer es “ganarle en las paso”.
El Comité Nacional de la Unión Cívica Radical trabaja cotidianamente para fortalecer Juntos por el Cambio.
— Unión Cívica Radical (@UCRNacional) October 4, 2022
Cualquier manifestación que se aparte de ese rumbo, no importa de donde provenga, lesiona la esperanza que venimos construyendo desde JxC. pic.twitter.com/waRrpQD2hX
COMUNICADO | Respetar la pluralidad para construir un mejor Juntos por el Cambio pic.twitter.com/mjNxaGzBfg
— UCR Buenos Aires (@UCRBuenosAires) October 4, 2022
El radicalismo por su parte reaccionó de manera diversa en esta situación. La mesa nacional que preside Morales le lanzó una advertencia al neurocientífico con el comunicado que difundió, en el cual declararon que “cualquier manifestación que se aparte de ese rumbo, no importa de dónde provenga, lesiona la esperanza que venimos construyendo desde JxC”.
Sin embargo, en la UCR bonaerense la postura fue otra: llamaron a “respetar la pluralidad para construir un mejor Juntos por el Cambio”. “Cualquier intento de uniformidad lesiona la construcción de un proyecto colectivo y democrático”, agregaron en una defensa al neurocientífico.
Es que la filial bonaerense del partido centenario es presidida por Maximiliano Abad, presidente del bloque de Juntos en la cámara de diputados de la provincia y uno de los encargados de convencer a Manes de que encabece la formula radical en 2021. Su principal respaldo está en la estructura radical de PBA, que apoya y alienta su candidatura a presidente.
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