Inauguración de sesiones ordinarias en la Provincia

El discurso de Axel y los lugares opositores de la discordia

Desde el cruce de fotos pasando por las críticas del discurso, Manes y Santilli se pararon frente a lo sucedido con Kicillof en la Legislatura. Valenzuela, el lugar de los intendentes, el hemiciclo y el rol opositor.



Estaba claro que no iba a ser una inauguración de sesiones cualquiera. Por lo que significa este año, por las elecciones y por las intenciones del gobernador Kicillof, explicitado casi al inicio de su discurso: más que el último discurso de gestión, lo planteó como “el último de su primera etapa como gobernador”.
 
Lo concreto es que todo derivó en una situación inesperada, polémica y que fue eje de buena parte de la jornada, incluso mientras se desarrollaba el discurso: los lugares opositores.
 
Los diputados nacionales Diego Santilli (también precandidato a gobernador) y Facundo Manes (presidenciable de la UCR, por ahora) junto al intendente Diego Valenzuela denunciaron en sus redes sociales que el gobierno provincial no le había reservado un lugar en el recinto para seguir el discurso.
 
Es por ello que terminaron en la oficina del radical Maximiliano Abad (también precandidato a gobernador), cuyo detalle de las camisetas de Aldosivi y Alvarado (equipos de Mar del Plata, de donde es oriundo) no pasó desapercibido para diversas bromas de usuarios. Allí, los tres dirigentes siguieron las alternativas atentamente.


 
“En la democracia de Kicillof sólo sus amigos lo aplauden desde el balcón…” chicaneó Christian Gribaudo (presidente de Juntos en el Senado) donde mostró que se había roto un presunto acuerdo entre oficialismo y oposición para que los dirigentes ocupen uno de los palcos de la legislatura. Allí se pudo ver, entre otros, a Roberto Baradel, Hugo Moyano, Oscar De Isasi, entre otros.
 
El gobierno provincial, en medio del discurso, rápidamente salió a aclarar. Desmintió un posible acuerdo de ocupar un palco para la oposición e institucionalmente indicó que los tres tenían lugar en distintos sectores, pero que podían haber seguido el discurso desde el recinto.
 

Por un lado, Valenzuela tenía lugar en el balcón donde se sentaron los intendentes, mientras que Manes y Santilli podrían haber ocupado dos de las tres sillas del hemiciclo, es decir, delante de las bancas de los diputados, lugar destinado a los legisladores nacionales.


 
La intención opositora, según logró saber NuevaBA, era asistir a escuchar “cómo va a dejar la Provincia Axel Kicillof” en una chicana sobre todo del sector Pro, que impulsa la precandidatura de Santilli. Maximiliano Abad, otro de los postulantes de Juntos por la UCR, fue más directo e increpó durante varios minutos a Kicillof cuando le tocó hablar sobre la situación de IOMA.
 
“Después charlamos, no puedo ahora, no hagamos un show. Después te escucho Abad” le respondió el gobernador al diputado. “Kicillof no escucha” señalaron los militantes del partido centenario tras esa respuesta. Quien también criticó a los gritos al gobernador en su discurso fue Walter Lanaro (Pro) que responde al ritondismo.
 
Lo concreto es que detrás del discurso de Kicillof y más allá de balances, anuncios y pistas sobre su futuro, se vio a una oposición unida, como pocas veces, contra su gestión.



COMENTARIOS