La motosierra de Milei: la Universidad de Quilmes anunció que recortará su oferta de grado

Los recortes del Presidente Milei y el gobierno nacional siguen generando duras consecuencias en todo el territorio bonaerense: la Universidad Nacional de Quilmes (UNQUI) anunció que habrá modificaciones en la oferta académica de grado y posgrado por el congelamiento presupuestario.
 
Cabe recordar que las universidades continúan funcionando con el Presupuesto de 2023: esto no contempla la inflación de todo el año pasado (cercana al 200%) y lo sucedido en los últimos dos meses, ya en gestión Milei, donde se cree que los precios se incrementaron, en promedio, más de un 50%.
 
Es por ello que “esa falta de actualización significa una fuerte reducción de los recursos necesarios para el normal funcionamiento de las universidades".
 
Y esa medida genera graves consecuencias. La UNQUI expresó en un comunicado que “una parte de la oferta académica de grado y pregrado se adecuará a las posibilidades presupuestarias actuales". Es por eso que, señalaron, "ya no será posible costear cursos adicionales y contratos de docentes extras".
 
"En los próximos períodos de inscripción a materias se establecerán nuevos topes: En la modalidad presencial, habrá inicialmente una inscripción a 2 materias y se habilitará la inscripción a una tercera materia en la fecha prevista para la inscripción a materia adicional". En la modalidad a distancia se admitirá hasta 3 materias por periodo. El recorte será complejo para el desarrollo académico normal.
 

“Lamentamos tener que adoptar estas medidas, y exhortamos, una vez más, a las autoridades nacionales a revertir estas decisiones en el menor tiempo posible" expresaron, lamentándose por el hecho, en un comunicado dirigido a docentes y estudiantes.

 
Todo esto se suma a las enormes complejidades de pago salariales apenas pasados los primeros días de la gestión Milei: la Federación Nacional de Docentes Universitarios (CONADU) dejó en claro que “la resolución del Banco Central de la República Argentina que impide a las entidades bancarias realizar adelantos para asegurar el pago de haberes del sector público impacta directamente en el personal de las universidades públicas, muchas de las cuales ya están comunicando que no podrán abonar los sueldos hasta que el gobierno nacional realice las transferencias correspondientes en fecha no determinada”.