La interna de la UCR, en llamas

Tras el escándalo en la interna de la UCR, judicializaron el escrutinio

Los dos candidatos, Miguel Fernández y Pablo Domenichini, se adjudicaron el triunfo. La Junta Electoral consagró al candidato del oficialismo y quedó impugnado un distrito clave. El opositor fue a la Justicia: dice haber ganado por 500 votos.



En una sorpresiva y muy pareja elección de la UCR, que tuvo un peso determinante en la Tercera Sección Electoral, la Junta Electoral Partidaria consagró a Miguel Fernández como nuevo presidente del Comité Provincia, pero el candidato opositor se adjudicó la victoria, no reconoció a Fernández y con un distrito impugnado clave, judicializó la elección.
 
El sector de Futuro Radical, que encabeza el diputado provincial, presentó un recurso de apelación en la Junta Electoral Partidaria tras diversas irregularidades durante la madrugada del lunes, luego de la elección.
 
La Junta Electoral boina blanca publicó, después de que los dos candidatos celebren la victoria, un documento “informativo” dado que se trataba de resultados provisorios. Allí, se indicó que la Lista 23 “Unidad Radical” ganó por el 55,38% de los votos, ganando en casi todas las secciones electorales.
 
El tema fue la Tercera Sección: allí, hubo una victoria abrumadora de Domenichini, y por la diferencia poblacional, le daría –según su versión- el triunfo en la Provincia. Sin embargo, la oposición denunció que tras la impugnación de Quilmes, y varias denuncias de irregularidades, impidieron finalizar el conteo provisorio. La llegada del comunicado informativo hizo explotar todo.
 
En diálogo con NuevaBA, desde Futuro Radical buscan dejar sin efecto el escrutinio provisorio acusando de “malos manejos” de la Junta Electoral partidaria.
 
Se apeló, en concreto, la resolución 66/2024 de la Junta Electoral partidaria por considerar la toma de decisiones “manifiestamente parcial y arbitrario”. Más aún “que no tiene otro objeto que formar opinión pública y confundir a los afiliados”. En estricto off, apuntaron contra el presidente de la Junta, socio del apoderado de la lista de Fernández, lo que es catalogado de “manifiesta arbitrariedad”.
 

La misma fuente defendió lo sucedido en Quilmes y dejó en claro que “no hubo un solo incidente” y que el detalle es que “hubo fiscales en todos los lugares de votación”.


 
El propio Fernández aclaró, horas después, que “la Junta no proclama un ganador, solo publica el provisorio para que se puedan objetar los resultados de uno y otro sector. Nosotros impugnamos Quilmes y Futuro Radical Médanos. La Junta dice que hay en discusión 6.289 votos y no incluye a los distritos objetados en el escrutinio, por eso se genera una diferencia aún mayor. Admitimos que en Quilmes gana Futuro, pero no por la diferencia que ellos dicen”.
 
Domenichini, pidió con un tono de ironía que “muestren las actas” tal como sucedió en las últimas elecciones de Venezuela. El optimismo es alto: “no hubo irregularidades y creemos que se triunfó limpiamente por más de 500 votos” cerró.
 
Desde el oficialismo, en tanto, indicaron que “no hay nada que discutir” y acusaron a los opositores de “querer embarrar una elección en la que triunfamos en siete de las ocho secciones electorales con claridad”.
 
Lo que parecía una elección más tranquila, derivó en un escándalo que tendrá instancia judicial, dos ganadores y un final abierto para determinar quién conducirá los destinos de la UCR desde este año en la Provincia.



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