Presupuesto 2025

Entre sorpresas y negociaciones sin tregua, Kicillof no tendrá Presupuesto 2025

Por ahora: se prevé que las negociaciones retomen en enero. Si bien habría acuerdo para tratar todo en verano, el gobernador acusó de “golpe de la oposición”. El radicalismo, uno de los dispuestos a dialogar, lo cruzó con dureza.



En una jornada maratónica, donde los votos parecía que estaban y todo se caía, idas y vueltas, negociaciones truncas y un final incierto, finalmente se cayó la sesión en la que se trataría el Presupuesto, pero también dos proyectos importantes para las finanzas de la Provincia: modificaciones a la Ley Impositiva y el pedido de endeudamiento. Todo con final abierto, aunque cuando había buenas sensaciones, un comunicado de Provincia volvió a tensar todo.
 
El punto clave fueron los fondos para intendentes: entre un pedido y la contraoferta, había 300 mil millones de pesos de diferencia aproximadamente. La oposición (enfatizada en la UCR y el PRO) pedía 470 mil millones de pesos para repartir en los 135 Municipios, mientras que Gobernación se estiró hasta 160 mil millones. “Era imposible, si no entienden que todos tenemos necesidades y hay que ceder, no había forma de ponerse de acuerdo” admitió uno de los alcaldes opositores que participó de las consultas por las negociaciones ante una consulta de NuevaBA sobre cómo estaba la situación.
 
Es que ese punto trababa todo el resto: sobretodo el pedido de endeudamiento por 1.2 billones de pesos que, según explicó gobernación, era para pagar deuda contraída en la gestión de María Eugenia Vidal. ¿Por qué Gobernación estaba tan interesado en este punto? Por dos cuestiones: primero porque necesitaba, si o si, los dos tercios de los votos, y la única forma de lograrlo era con la oposición. La segunda, porque de no tener este endeudamiento la Provincia quedaría expuesta a una situación delicadísima en torno a sus finanzas.
 
De hecho, el Presidente de la Cámara de Diputados, Alexis Guerrera, admitió que entre tanto desacuerdo, hubo “un acuerdo” de retomar las negociaciones el 7 de enero. Fue en una reunión donde participaron todos los bloques de diputados, funcionarios provinciales como Gabriel Katopodis, Agustina Vila y Pablo López y en la que se buscará armar una mesa de diálogo para “contemplar todas las necesidades y requisitos”.
 
Sin embargo, la oposición hizo énfasis en un punto en común: falta de diálogo político. Si bien lo expresó abiertamente Diego Garciarena, de la UCR + GEN, otros consultados por NuevaBA quisieron dejar expreso que “en el gobierno de Kicillof falta política. Había muchas formas de ponernos de acuerdo y no sólo hubo bastante intransigencia en su propuesta, también hubo una falta de diálogo durante mucho tiempo. Demasiado. Cuando quisieron hacer política era tarde”. Se insistió, incluso, en la “buena voluntad” de aprobar los proyectos “pero con nuestra participación”.


 
Garciarena pidió discutir artículo por artículo “lo que se hizo el año pasado y este no”. “Hay que ser claros: quienes no quieren tener el presupuesto son aquellos que prefieren manejar los fondos de forma discrecional”, señaló por su parte, en un comunicado, el bloque de UCR + Cambio Federal. “El gobierno no aceptó sugerencias, ni aportes que pudieran enriquecer la propuesta. Tampoco se generó el ámbito de intercambio de trabajo que se acostumbra y que es sano para la vida democrática”, agregó ese espacio.
 
Agustín Romo, de La Libertad Avanza, mostró una postura más ortodoxa y esperable: “logramos evitar que Kicillof destruya a impuestos a los bonaerenses. Volveremos a discutir el presupuesto en febrero porque con nosotros para seguir aumentando el gasto público, los impuestos y la deuda NO CUENTA. La Libertad Avanza”.
 
El PRO siguió la línea del radicalismo: “la sesión cayó debido a la falta de consenso. Desde el PRO reafirmamos nuestro compromiso con que la provincia tenga su presupuesto, pero no a cualquier costo. Nuestras propuestas fueron claras y responsables: evitar subas indiscrimandas de impuestos, limitar el endeudamiento y frenar la creación de cargos políticos innecesarios”.
 
La Provincia cargó a fondo
 
En un comunicado donde las versiones con la oposición se encontraron de frente, Kicillof explicó las negociaciones que realizaron desde hace dos semanas para llegar a la oposición.
 

Dijo que se trató, explícitamente, de un “golpe de la oposición” y que entre reuniones “el Ejecutivo estuvo a disposición y en diálogo permanente con todos los sectores de la oposición para acordar el articulado a aprobarse”; y por el otro apuntó a las exigencias de esos sectores acerca del alcance de un monto para los municipios y de cargos en organismos constitucionales.


 
“La oposición presentó un nuevo requerimiento para la aprobación del endeudamiento: una proporción del 16,4% de la deuda que finalmente se contrajera debía distribuirse entre los municipios, a lo que el Ejecutivo propuso que sea del 10%. De este modo se distribuirían más de $250 mil millones. Sin embargo, luego de una larga negociación, la oposición planteó una serie de nuevas condiciones que excedían todos los pedidos anteriores”.
 
Sin el endeudamiento no había nada, por lo que expresó “no tiene sentido validar un plan de gastos”.
 
De hecho, no ahorró palabras para cargar contra Milei y relacionarlo con esta falta de Presupuesto: “la gravísima situación a la que nos sometió el presidente Milei durante este año”, a raíz de los recortes en el financiamiento federal a la provincia, la mayoría de los cuales Kicillof considera ilegales y objetó ante la Corte Suprema de Justicia. Dijo, en ese marco, que el rechazo de los proyectos de ley “un golpe de la oposición”,
 
“En este marco de emergencia, esta tarde el Gobernador y la Vicegobernadora se han reunido de urgencia con miembros del gabinete y con el equipo económico para readecuar las partidas y reprogramar la planificación del año 2025”, explicaron, en un encuentro de emergencia.
 
Nuevas tensiones


 
Tras el comunicado, uno de los sectores más predispuestos a dialogar y hacer aportes, UCR+Cambio Federal, salió a cruzarlo por la acusación de “golpe de la oposición”.
 
“Gobernador Kicillof ¿en serio cree que la oposición le hizo un “golpe”? Golpe es el que sufren cada día los afiliados de IOMA que no reciben atención. Golpe es el balazo que reciben las familias víctimas de la inseguridad. Golpe es la presión tributaria asfixiante sobre los bonaerenses” dijo Diego Garciarena, presidente de la bancada.
 
Le sugirió a Kicillof que “pruebe dialogando, buscando consensos, aceptando diferencias y asumiendo los propios errores. Estamos para dialogar y brindar las herramientas pero con racionalidad, realismo y sin chicanas. Con más democracia y menos golpes”.
 
Por lo pronto, entre reproches y tironeos, Kicillof cierra el año sin Presupuesto. Todo pasará para enero y febrero, pero la incertidumbre crece y las partes no ceden bajo ningún aspecto. El “falta política” ¿tendrá alguna consecuencia?



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