Temporada de saltos en la oposición

Montenegro, su posible pase a La Libertad Avanza y la territorialidad libertaria

El efecto cascada por el garrochazo de Valenzuela y Egüen tiene mesura: hay muchas variables en juego y el PRO resiste, más allá de la dura crisis de identidad. El intendente marplatense comparte agenda con el gobierno nacional y apunta a un dirigente: Kicillof.



Tras un año del desembarco de La Libertad Avanza al gobierno nacional, con todas sus medidas y consecuencias, era impensado vislumbrar este escenario: un PRO con crisis total de identidad, un movimiento libertario que empezó a crecer en volumen en la Provincia y con la territorialidad y estructura en la mira pensando en pelear la gobernación en 2027. Y entre esas señales, un Intendente está siendo analizado minuciosamente.
 
A las incorporaciones de Ramiro Egüen (25 de Mayo) y Diego Valenzuela (Tres de Febrero y ¿el posible candidato a gobernador de 2027?) uno de los que se menciona como salto inminente es el jefe comunal de General Pueyrredón (Mar del Plata) Guillermo Montenegro, un PRO de pura cepa que mostró, en esta temporada veraniega, las similitudes de agenda que comparte con La Libertad Avanza.
 
La agenda de acciones y también de adversarios políticos: Montenegro, uno de los que prácticamente pertenece a las líneas originarias del partido que fundó Mauricio Macri, logró quedarse con un territorio importante del interior de la Provincia, no sólo por su caudal electoral sino por la vidriera que otorga todos los veranos, siendo el punto turístico más mencionado a nivel nacional.
 
Este verano, trajo varias particularidades. A la floja temporada –que empezó a levantar en la segunda quincena- se le suma una fuerte campaña contra trapitos y gente en situación de calle, que Montenegro adjudica sin razón aparente al kirchnerismo y los trata de “delincuentes”. Videos prácticamente a diario que exhiben la violencia en el accionar dan muestra de sobra de este trabajo.
 

Es el punto más valorado por el gobierno nacional, según expresó un armador bonaerense en diálogo con NuevaBA. Saben que la agenda es prácticamente idéntica y las visitas a la ciudad costera así lo mostraron. La última, prácticamente de campaña, fue de Karina Milei y Martín Menem.




 
A eso se le suma el rival en común que comparten Montenegro y LLA: Axel Kicillof. Ya no son pocas las voces que consideran que la oposición debe aunar esfuerzos en la Provincia para ganarle a Unión por la Patria (en 2023 esa división fue clave para el triunfo del actual gobernador) y allí el gobierno está dispuesto a abrir sus brazos para recibir intendentes pero sobre todo, territorialidad del movimiento libertario, algo que en 2024 se marcó como un déficit.
 
Además la Provincia denuncia discriminación del gobierno de Milei cuando en Mar del Plata bajó la Coparticipación y no hacen obras porque gobierna el PRO. Ese discurso se tiene que terminar” dijo la fuente, incontrastable y visiblemente enojada por los movimientos del gobernador.
 
De todas maneras, nadie confirmó que Montenegro salte a las filas de La Libertad Avanza así como así. Explicaron a NuevaBA que “lo de Valenzuela y Egüen es distinto teniendo en cuenta cómo venían trabajando y sus horizontes políticos” y que “cada caso siempre es distinto”. Lo de Montenegro suena a coincidencias, pero no justificarían, al menos de forma instantánea, un salto a La Libertad Avanza.
 
Pero todo puede pasar. Tanto el gobierno nacional como los intendentes saben que tienen fuertes que pueden potenciarse en unión, pero también para negociar y llegar a acuerdos “beneficiosos”.
 
Las especulaciones continuarán, pero al momento no se vislumbra un efecto cascada como se anticipaba cuando Egüen y Valenzuela dieron el garrochazo. Mesura y prudencia, en tiempos donde esos valores no abundan en la política.



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