La grave inundación en Bahía Blanca

“La respuesta para esta catástrofe es Estado presente y obras públicas”

El gobernador Kicillof, gran parte de su gabinete y el intendente Susbielles realizaron un balance y anuncios para la ciudad en lo que se denominó como “etapa de normalización”. El gobernador insistió con pedir una reunión al Presidente Milei.



La ciudad de Bahía Blanca continúa en proceso de recuperación tras el devastador temporal que dejó al menos 16 muertos y severos daños en la infraestructura. Mientras se restablecen servicios y se avanza en la asistencia a los damnificados, el intendente Federico Susbielles y el gobernador Axel Kicillof destacaron el rol del Estado en la respuesta a la crisis y reclamaron mayor apoyo del Gobierno Nacional para la reconstrucción. Incluso, el Gobernador le pidió una reunión al presidente Milei para definir líneas de acción e incluso, que una porción del crédito del FMI vaya para Bahía Blanca.
 
En primera instancia, el intendente Susbielles informó que varias zonas de la ciudad están retomando la normalidad. En Ingeniero White, el casco histórico ya se encuentra sin agua, mientras que en General Daniel Cerri las áreas céntricas y cercanas a la Escuela 10 fueron despejadas. Sin embargo, persisten anegamientos en la zona de quintas, donde vehículos anfibios de la Marina realizan tareas de reconocimiento y entrega de asistencia.
 
El suministro de servicios esenciales muestra avances. Más del 80% de la energía eléctrica fue reactivada, los supermercados reabrieron aunque con stock limitado y el abastecimiento de combustible comienza a normalizarse. También se restableció el transporte público, con ocho líneas funcionando con recorridos habituales y el resto adaptando sus trayectos. La recolección de residuos volvió a operar y se habilitarán 24 puntos de distribución de alimentos y productos de higiene para los damnificados.
 

En el ámbito educativo, el relevamiento de 190 edificios escolares determinó que más de 80 instituciones están en condiciones de retomar las clases. Sin embargo, se deben completar trabajos de desinfección y prevención de riesgos eléctricos antes de la reapertura, prevista dentro de las próximas 48 horas.


 
Desde Bahía Blanca, el gobernador Axel Kicillof subrayó la magnitud del desastre y la necesidad de fortalecer la infraestructura para prevenir futuros eventos climáticos extremos. "Esto no es un castigo bíblico ni una película de terror, es producto del cambio climático", afirmó. También destacó el operativo de emergencia desplegado por la Provincia, con helicópteros, vehículos acuáticos, avión sanitario y la labor de más de 2.000 trabajadores, entre bomberos, personal de salud y Defensa Civil.
 
Kicillof enfatizó que la reconstrucción de la ciudad demanda recursos que exceden la capacidad del Municipio y la Provincia, por lo que instó al Gobierno Nacional a comprometerse en la planificación y financiamiento de las obras necesarias. "Sin Estado no hay respuesta. Sin obras públicas, no hay solución", sostuvo.
 
Hasta el momento, la administración de Javier Milei envió $10.000 millones para atender las primeras urgencias, aunque el intendente Susbielles estimó que se necesitarán más de $400.000 millones para la reconstrucción total de la ciudad.
 
Mientras la ciudad avanza en la recuperación, las autoridades mantienen la búsqueda de personas desaparecidas y continúan asistiendo a quienes perdieron sus hogares. La crisis cede, pero la reconstrucción recién comienza.
 
Para cerrar, Kicillof fue claro: “Es importante poder reunirnos para hablar de estas cosas al máximo nivel. Vuelvo a solicitar una reunión con el Presidente de la Nación. Ya que se habla del crédito del FMI espero que una porción determinada se use para temas como este”.



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